El Gobierno ha reafirmado su compromiso con la elaboración y aprobación de la Ley de Agricultura Familiar y Profesional, una norma que pretende reforzar el papel de la Agricultura familiar como motor de cohesión social, sostenibilidad territorial y garantía de relevo generacional en el medio rural.
Durante la clausura del acto de presentación del Anuario de la Agricultura Familiar de UPA, el ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, ha anunciado que tras el verano se convocará a las comunidades autónomas y agentes del sector agrario para consensuar los contenidos de la ley, tras haber recibido 67 aportaciones en la fase de consulta pública abierta el pasado marzo.
“Vamos a acelerar todo lo que sea posible. Estamos absolutamente comprometidos con esta tarea”, ha señalado Planas, quien ha subrayado que esta ley es uno de los objetivos prioritarios de la legislatura. Entre los aspectos clave que abordará la norma se encuentran la fiscalidad adaptada a las pequeñas explotaciones, el relevo generacional y la igualdad de género en el campo.
El ministro ha defendido que el modelo de agricultura familiar está profundamente vinculado al territorio y combina explotaciones gestionadas por agricultores a tiempo completo con otras de carácter parcial o complementario. “Unos y otros dan vida a nuestros pueblos, al medio rural, y eso no está suficientemente retribuido”, ha manifestado.
El objetivo, ha explicado, será establecer criterios claros para identificar a las entidades prioritarias que deben recibir el mayor apoyo de las ayudas públicas, tanto en la futura ley como en el marco de la nueva Política Agraria Común (PAC).
Relevo generacional: reto urgente
La ley llega en un momento crítico para el campo español. Según la última encuesta sobre estructura de explotaciones agrarias, el número total de explotaciones ha descendido un 12,4 % desde 2020, situándose en 784.140, mientras que la superficie agrícola utilizada apenas ha disminuido un 1,6 %, lo que evidencia un aumento del tamaño medio de las explotaciones.
Además, más del 67 % de los trabajadores agrarios supera los 55 años, una situación que, según Planas, “hace imprescindible garantizar el relevo generacional como única garantía de futuro para el sector”.
Premios a la cultura rural
Durante el acto también se han entregado los Premios de la Fundación de Estudios Rurales, que reconocen la labor de personas que impulsan el desarrollo y la visibilidad del sector agroalimentario. Entre los galardonados, el artista asturiano Rodrigo Cuevas recibió el Premio de Cultura, Arte y Literatura por su contribución a la difusión de la cultura rural, en palabras del ministro, “por devolverle al mundo rural el lugar que merece en nuestra identidad”.
Con esta futura ley, el Gobierno busca modernizar el campo sin perder su esencia, garantizando que las explotaciones familiares sigan siendo columna vertebral de un modelo agrario más justo, resiliente y sostenible.